El proceso
El sueño es un proceso complejo en el cerebro que se ve afectado por muchos factores internos y externos. El proceso completo del sueño, desde acostarse hasta levantarse, se puede dividir en cuatro fases:
1. La preparación.
2. quedarse dormido
3. dormir
4. despertar
1. La preparación.
Bostezos y párpados pesados: estos son síntomas claros de que se estás cansando. Así es como tu cuerpo te dice, después de un período de actividad mental y física, que necesita descansar.
2. quedarse dormido
Poco a poco nos volvemos menos conscientes de nuestro entorno. Una característica distintiva es que los movimientos rápidos de los ojos cambian a movimientos lentos y giratorios. Cuando nos dormimos nuestra temperatura corporal disminuye. Para que esto suceda, nuestro cuerpo libera agua (transpiración) que se evapora en la piel. Por eso es importante la ventilación adecuada de tu dormitorio, colchón y cama.
3. dormir
El sueño en sí consiste en varios ciclos. Después de cada ciclo hay una etapa de transición, durante la cual nos despertamos momentáneamente. En promedio, nos despertamos de siete a diez veces cada noche, generalmente sin ser conscientes de ello.
Dentro de cada ciclo de aproximadamente 1,5 horas, pasas por las siguientes 3 fases:
- Sueño ligero: la primera etapa del sueño es ligera y corta. Solo pasas por esta etapa unas cuantas veces cada noche. Cuando llegas a esta fase por primera vez, tus pensamientos disminuyen lentamente y tus músculos comienzan a relajarse. Entonces tu ritmo cardíaco se ralentiza y la temperatura de tu cuerpo desciende.
- Sueño profundo: después de unos 20 minutos, tu cuerpo y tu cerebro se relajan extremadamente. En su punto, tu actividad cerebral alcanza su punto más bajo. Esta etapa también se conoce como "sueño profundo". Durante este sueño profundo, la posibilidad de que se despierte espontáneamente es muy pequeña y será difícil despertarlo. El sueño profundo es muy importante para su recuperación y salud física y mental.
- Sueño REM: después de unos 30 minutos de sueño profundo, sucede algo extraño: tu cerebro y tu cuerpo se mueven rápidamente, en lugar de relajar, su ritmo cardíaco se acelera, tu respiración se vuelve superficial y tus ojos saltan de izquierda a derecha. Ahora estás en un sueño REM, llamado así por estos movimientos rápidos de los ojos. Esta es también la fase en la que tienes sueños. Te despiertas momentáneamente, comienzas un nuevo ciclo y vuelves a pasar por las diferentes fases.
4. despertar
En las primeras horas de la mañana, proporcionalmente, se producen menos fases de sueño profundo, lo que permite que la transición al despertar tenga lugar de manera más gradual. Cuando te despiertas, la temperatura de tu cuerpo aumenta.